La culpa de todo la tiene Mariu, que no hace más que proponernos planes molones.
Resulta curioso pensar que nos hayamos conocido a través de una red social (en este caso Instagram), pero así es. El caso es que surgió la idea de juntarnos para algo más que tomar un café (porque lo cierto es que siempre que coincidimos nos quedamos con ganas de más) y os podéis imaginar lo que tardamos en decir todas que sí. Bea (@beatrizmillan), Clara (@clarabmartin), Cristina (cristinaferrer), Sofía (@entrelasramas), Mariu (@gelatinadeplata), Mónica (@monicadiago), Mery (@ouiouidetalles), Teresa, (@teresaloboarregui), María (@unamamamotera) y yo, con nuestras respectivas familias.
Escogimos un fin de semana de abril para que hiciese mejor tiempo y para que María, a escasas dos semanas de su fecha «improbable» de parto, pudise apuntarse al menos uno de los días.
Poco a poco, se acercaba la fecha marcada y, en el último momento, estuvimos tentadas de cambiar los días porque las previsiones del tiempo daban lluvia, pero finalmente decidimos no moverlo por si en un futuro nos resultaba más difícil coincidir a todas.
Los días previos yo estaba emocionada, ¡me apetecía muchísimo pasar un finde todas juntas con nuestra familias!
Sábado
El sábado me desperté temprano para terminar de preparar las maletas. En apenas dos horas, llegábamos a Cutamilla, una enorme y maravillosa finca que, además, es una reserva natural. Un lugar súmamente cuidado y absolutamente impresionante en plena naturaleza. Sencillamente espectacular.
Después de dejar las maletas, y según las previsiones temiendo que el tiempo se estropeara, aprovechamos para hacerles algunas fotos a los niños con todo el atrezzo que nos había prestado Bel and Soph. La verdad es que tienen unas cosas preciosas.
Luego los niños pudieron dar una pequeña vuelta montando en burro.
Y, poco antes de comer, sacamos las varitas y coronas de Tipi Too para jugar un rato. Son súper bonitas, me encantan.
Como el tiempo seguía acompañando, tuvimos la suerte de disfrutar de un picnic al aire libre. Y no de un picnic cualquiera. Mara (la dueña de la casa) lo tenía todo montado y preparado con un gusto exquisito y, por si fuera poco, estaba todo delicioso.
Un llamativo humus rosa (con remolacha), ensalada de granada, patatas con costillas y algunos dulces de postre. Todo riquísimo.
Durante la sobremesa, las niñas jugaron a disfrazarse con algunas capas y vestidos también de Bel and Soph, así que durante un rato nos sumergimos en su pequeño mundo de fantasía.
Luego organizamos un taller con los niños para pintar las resultonas casitas de This is Karton y, como al final de la tarde llovió un rato, algunos pequeños disfrutaron saltando afuera con sus botas de agua. Al caer la noche, salimos a mirar las estrellas en un cielo terso y limpio.
Domingo
Despertarse el domingo por la mañana y encontrarse un desayuno como el que nos tenían preparado, hace que te encuentres de buen humor desde primera hora, ¡qué maravilla! La impresionante mesa del comedor estaba llena de tostadas, bizcochos, café y cruasanes recién horneados. Mmm…
Enseguida salimos al jardín y comprobamos que tendríamos de nuevo un tiempo espléndido (¡menuda suerte, y eso que daban lluvias!), así que otra vez podríamos disfrutar al aire libre.
A primera hora, Pilar y Ana (las chicas de Crecer con Emoción) les habían preparado a los niños algunos juegos sensoriales relacionados con la naturaleza y el entorno y, después, un entretenido juego de pistas que requería la participación de los mayores y que consistía en construir un nido para guardar huevos de chocolate, todo muy divertido. La verdad es que fueron encantadoras y se metieron a los niños en el bolsillo desde el minuto uno.
Cámara en mano, emprendimos todos juntos la marcha para hacer una pequeña excursión y tuvimos incluso que atravesar las vías del tren. Los niños cruzaron en un todoterreno por debajo de un puente y además pasando por encima de un charco importante, así que le añadimos un toque bastante aventurero al paseo.
De nuevo Mara nos sorprendía con un picnic espectacular a base de un gustoso picoteo, previo a las magníficas hamburguesas gourmet que nos prepararon allí mismo, junto al río.
La carne de Cutamilla procede de las propias reses de la finca, criadas al aire libre, y además se pueden hacer pedidos e incluso ¡te la envían a casa! Está exquisita.
A la vuelta, los niños se entretuvieron un rato pintando el impresionante mural de Omy de Luna de Papel mientras nosotras nos hacíamos una foto todas juntas.
Os podéis imaginar lo bien que lo pasamos. Nuestras familias conectaron muy bien y disfrutaron un montón. Niños y mayores se divirtieron y, nosotras, charlamos, nos reímos, y pasamos dos días magníficos. La única pena es que al final María de Oui Oui no pudiera venir, pero nos hemos quedado con ganas de más así que ya nos buscaremos una excusa pronto.
Gracias por todo, Cutamilla, y ¡feliz miércoles a todos!
Celia!! Y dices que te tengo que dar clases?? Sí tus fotos son preciosas! Me ha encantado leer tu crónica! Leeyendoos a todas hoy me he vuelto a teletransportar a Cutamilla. Ahhhh!
Besotes!!!
Qué maravilla de fotos!!! me encantan todas… la verdad es que ha sido un fin de semana inolvidable. Me encantó las buenas migas que hicieron Guille y Carlos, Elena y Carla… y los Guilles:) nos tenemos que juntar más. Un beso enorme.
QUe fotos más bonitas, y menudo finde pasásteis, se intuye todo genial, tanto las fotos por como lo contáis. Y que tiempazo, yo soy de Guadalajara y Sigüenza es de la parte más fría, pero cuando hace bueno hace bueno y es la zona más bonita!!!! Besazos
Pero qué bonitas fotos Celia!!!! Vaya familia bonita y que bien haber pasado finde en Cutamilla!!!! Para cuándo otro jajajaja
Qué fotos tan bonitas y tan emotivas!!! Qué caserón más bonito, a mí también me encanta la montaña, respirar aire fresco, paz y tranquilidad. Y los disfraces de los peques super bonitos!!! Que gran amistad!!!
Un beso!!!
Clara!!! es todo muy bello! que lindas amigas, bellos niño/as y bebes! Sigo tu blog y me encanta cómo estás haciendo redes de mujeres. Otro día te escribo y te cuento de mí, desde Argentina.
Un saludo muy grande y admiro lo que hacés.